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Categoría:
Trauma
Introduccion:
La fractura de fémur proximal en ancianos constituye una patología frecuente en nuestra sociedad, que asocia una significativa morbimortalidad y una pérdida de función global del paciente. En los últimos años el manejo multidisciplinar entre traumatólogos y geriatras ha permitido una mejoría en la calidad asistencial gracias a una optimización preoperatoria, una movilización precoz, así como un mejor control de las comorbilidades. Des de 2012 en nuestro centro los pacientes mayores de 65 años con fractura de fémur proximal ingresan en la Unidad de Ortogeriatría, donde son llevados por internistas especializados en geriatría con el apoyo del servicio de traumatología.
Objetivos:
Analizar el efecto de la implantación de la Unidad de Ortogeriatría en nuestro centro en términos de estancia hospitalaria, transfusiones, complicaciones y mortalidad.
Material y metodología:
Se analizaron retrospectivamente 2 cohortes de 120 pacientes afectos de fractura de fémur proximal del anciano. Una previo a la implantación de la Unidad de Ortogeriatría (Cohorte A) y la otra posterior a esta implantación (Cohorte B). Fueron excluidos los menores de 65 años, pacientes politraumáticos o pacientes intervenidos mediante osteosíntesis con tornillos canulados. Las variables analizadas fueron sexo, edad, comorbilidades, patrón de fractura, tiempo hasta la intervención quirúrgica, índice transfusional, estancia hospitalaria, complicaciones, tasa de reingreso y mortalidad.
Resultados:
En la cohorte A la estancia media fue de 14,9 días y en la cohorte B de 10,3 días. La tasa de transfusión fue de 0,4 y de 0,57 respectivamente. Un 62% de los pacientes de la cohorte A y un 77% de la cohorte B presentaron alguna complicación intrahospitalaria. En la cohorte A se detectó un 14% de complicaciones extrahospitalarias y un 8% en la B. La mortalidad fue de un 70% y de un 46% respectivamente.
Conclusiones:
La implantación de la Unidad de Ortogeriatría ha permitido una mejoría en la calidad asistencial en términos de disminución de la estancia hospitalaria, del porcentaje de complicaciones extrahospitalarias y de la mortalidad. Aun así, la morbimortalidad es alta, hecho que nos hace seguir mejorando en el tratamiento y prevención de esta patología cada vez más prevalente.